Un crimen, una investigación, un culpable. El enigma policial es una forma narrativa perfecta que nos seduce inmediatamente porque enciende nuestro deseo de averiguar lo que está oculto y nuestro instinto de justicia.
Lo mejor de los misterios es la posibilidad de resolverlos. Y ahí está el policial para hacernos creer que detrás de cada incógnita, de cada enigma, está la llave que encaja en la cerradura y resuelve el misterio.