Trata de entender el designio tras cada nuevo intento. La repetida sensación de inseguridad y descaro. La página (el lienzo) vacía y el deber impuesto por toda la Naturaleza junta, de ir y tocar ese punto. Echada la Vida en un diván, pide ser vista y oída con la más aguda ciencia de la intuición amante: cada nuevo intento es un examen de amor. La Bella Dama oculta un habitáculo erógeno y hay fila de errantes que la quieren hurgar, pero él sabe que es suya, como una ofrenda gratuita, como una prueba, como una tenue intimidación fatal. La Naturaleza (la Vida) y el lienzo (la página) en blanco. La espera. La irrazonada embestida hacia la primera forma de una posible creación. Ella es la virgen y la loca, la endiablada ninfa conocedora de Dios, hija de la serpiente, hija del ave blanca, cabizbaja, burlona, madre potencial de un soñado paraíso.
Él trata de entender por qué retorna. Por qué esta sudoración obligada. ¿Qué ha sido de las obras pretéritas? ¿Dónde quedaron esos campos de girasoles, esa noche curva, esos montículos de paja, ese muchacho ígneo de pupila azul? Todo se ha ido en aparente derrota. La Hembra no ha parido al Libertador. Quizá más pizcas de verde, más ondulaciones ahora, más ímpetu, y será el último cuadro, el de la conquista sobre la mortalidad. Un último poema y habrá tanto gemido de luz en las paredes, en su piel, en el cosmos, tantas revelaciones volcánicas que el fatigado artista reposará. La Vida le traerá un desayuno a la cama.
Marcos David Porrini es escritor, poeta y narrador argentino. Es productor y guionista de obras de teatro, performances y meditaciones filosóficas. Su libro más reciente “Para andar por encima del mundo. Textos de un pájaro azul” con más de 70 poemas y relatos, lo ubica como importante emergente cultural de la nueva generación de artistas argentinos.