A medida que entraba al bar se escuchaba sonar la banda y de inmediato se me cruzó un pensamiento: “Black Sabbath, siempre se vuelve a BS…¿porque?”
Es simple, me contesté, lo inventaron casi todo. Ahora está sonando una banda acá en Morón, un lugar que se podría considerar referente ”under” y se escucha entre líneas el legado de esa banda que inició un nuevo género, allá por 1970.
Me pregunto si es válido beber de esas fuentes, y una respuesta instintiva me surge: claro que sí.
Soy de los 90 y en mi opinión fue la última década en que las bandas tenían algo nuevo para decir, porque a pesar de que el rock siempre se auto-referenció, siempre tuvo algo nuevo para decir.
Hoy eso parece estar fuera de moda.
Por suerte existen lugares en Argentina como éste, en el conurbano bonaerense, donde una banda evoca a Black Sabbath, y eso se debe festejar, porque es un indicador de que en Argentina la llama del rock sigue encendida.
Yo lo puedo percibir; nos abruman con otras corrientes y estilos desde las playlist de Spotify o de las radios, pero al rock siempre se vuelve. Todavía se ven remeras de bandas que ya no existen pero que escribieron una página en la historia del rock.
En este mismo momento veo una joven de unos 25 años con una remera de Motorhead y su pareja con una de Bad Religion, extraña combinación ¿no?…. Es que el rock traspasa barreras que, por ejemplo, la política no puede. Unir gentes, pasar barreras, hacerte pensar….ver que las diferencias nos unen ante la opresión del sistema. ¿Qué podríamos aportar al respecto? Quizás sea mantener el compromiso de sostener esa llama de guitarras distorsionadas, de rebeldía, que por adolescente no es menos válida que la de un adulto….
José María Castillo aka “Josema”, es un músico y compositor argentino, nacido en la localidad de El Palomar, Buenos Aires.
Fue fundador de varias bandas de punk rock y participó en otras dentro del género rock.
Estudia Gestión del Arte y la cultura en la Universidad de Tres de Febrero UNTREF.